La actualización de las Tablas de Enfermedades de Trabajo en México ha marcado un hito histórico después de medio siglo sin cambios significativos. Este logro, celebrado por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), redefine el panorama de la salud ocupacional al incorporar 88 nuevas enfermedades laborales, desde pérdida del embarazo hasta el estrés grave y el Covid-19. En este artículo, exploraremos a fondo la importancia de estas tablas, su propósito y cómo se han transformado para reflejar las necesidades actuales de la fuerza laboral mexicana.
¿Qué es la Tabla de Enfermedades Profesionales?
La tabla de enfermedades profesionales es la herramienta fundamental que permite a los médicos del trabajo realizar diagnósticos precisos basados en las condiciones y actividades laborales. Profundizaremos en cómo esta tabla se ha actualizado para reflejar la evolución de la medicina del trabajo y alinearse con estándares internacionales, como la Clasificación Internacional de Enfermedades CIE-11 de la Organización Mundial de la Salud.
¿Qué Enfermedades Son Consideradas Enfermedades Laborales?
Las enfermedades laborales, reconocidas en la nueva tabla, abarcan una amplia gama de padecimientos, desde infecciones hasta trastornos mentales. Este cambio no solo amplía el espectro de patologías reconocidas sino que también refleja una comprensión más completa de los riesgos asociados con diversas ocupaciones. Exploraremos los cambios clave y su impacto en la salud ocupacional.
¿Quién Determina la Tabla de Enfermedades Laborales?
La determinación de la tabla de enfermedades laborales implica una colaboración entre el Gobierno de México, expertos en salud en el trabajo y representantes de trabajadores y empleadores. Analizaremos el proceso meticuloso llevado a cabo por la STPS y la Comisión Consultiva Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (COCONASST), asegurando que las nuevas tablas reflejen avances científicos y las necesidades actuales de la fuerza laboral.
La Última Actualización de la Tabla de Enfermedades y sus Cambios Significativos
La tabla de enfermedades profesionales en México experimentó su última actualización el 24 de octubre de 2023, marcando un hito crucial después de medio siglo sin cambios sustanciales. Esta revisión, celebrada por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), representa un esfuerzo conjunto del Gobierno de México, expertos en salud en el trabajo y representantes de trabajadores y empleadores para adaptar la tabla a los avances científicos y las necesidades actuales de la fuerza laboral.
Entre los cambios más notables introducidos en esta actualización se encuentran:
- Ampliación de Enfermedades Infecciosas y Parasitarias: El reconocimiento de padecimientos infecciosos y parasitarios ha aumentado de 21 a 41, reflejando una comprensión más detallada de los riesgos asociados con este tipo de enfermedades.
- Crecimiento Exponencial de Cánceres de Origen Laboral: La lista de cánceres de origen laboral se ha expandido de cuatro a 30 tipos, destacando un enfoque más exhaustivo para abordar los riesgos asociados con la exposición laboral.
- Inclusión de Trastornos Mentales: La tabla ahora reconoce explícitamente trastornos mentales como estrés, ansiedad, depresión e insomnio, reflejando una comprensión más completa de los desafíos psicosociales en el entorno laboral.
- Aumento en Enfermedades del Sistema Respiratorio: Se ha agrupado un conjunto más amplio de enfermedades del sistema respiratorio (de 36 a 40), abordando específicamente los riesgos para la salud pulmonar en diversos entornos de trabajo.
- Incorporación de Enfermedades del Sistema Digestivo: Se han añadido tres patologías al grupo de enfermedades del sistema digestivo, reconociendo los riesgos asociados con esta área del cuerpo en el entorno laboral.
- Expansión en Enfermedades de la Piel y Tejido Subcutáneo: El número de enfermedades de la piel y tejido subcutáneo se ha incrementado de 12 a 14, reflejando una mayor atención a los riesgos dermatológicos en el trabajo.
- Crecimiento en Intoxicaciones Reconocidas: El reconocimiento de enfermedades por intoxicación ha pasado de 37 a 46, abarcando un espectro más amplio de riesgos relacionados con sustancias químicas y tóxicas en diversos entornos laborales.
Estos cambios no solo son un reflejo de los avances en la comprensión científica de las enfermedades laborales, sino también una respuesta a la evolución de los entornos de trabajo y los riesgos asociados. La actualización de la tabla no solo busca cumplir con estándares legales, sino que demuestra un compromiso continuo con la salud y seguridad de la fuerza laboral en México.
Enfermedades y el Control Documental de Proveedores y Contratistas
La reciente actualización de las Tablas de Enfermedades de Trabajo en México no solo tiene implicaciones directas en la salud y seguridad de los trabajadores, sino que también establece un vínculo crucial con el control documental de proveedores y contratistas. Estos cambios significativos en la tabla repercuten en la gestión de prestadores de servicios, introduciendo nuevas consideraciones que deben integrarse en los procesos de control documental.
La inclusión de enfermedades antes no reconocidas y la expansión de categorías existentes exigen una revisión exhaustiva de los protocolos de salud y seguridad implementados por proveedores y contratistas. La actualización de la tabla, al abordar trastornos mentales, ampliar el reconocimiento de cánceres de origen laboral y agregar patologías específicas, requiere una adaptación en la documentación proporcionada por estos actores clave en el entorno laboral.
En este contexto, las empresas y entidades responsables del control documental deben actualizar y mejorar sus procesos para reflejar los nuevos estándares establecidos por la tabla actualizada. Esto implica la revisión de expedientes médicos y la documentación relacionada con la salud ocupacional de los trabajadores contratistas y proveedores, garantizando que estén alineados con los cambios en la tabla de enfermedades.
El control documental ahora debe considerar no solo las enfermedades físicas tradicionales sino también los aspectos relacionados con la salud mental y otras patologías recientemente reconocidas. La documentación de medidas preventivas, evaluaciones médicas y planes de seguridad debe ser revisada y ajustada para abordar estos nuevos elementos.
En resumen, la actualización de la Tabla de Enfermedades de Trabajo no solo impacta directamente en la salud y seguridad de los trabajadores, sino que también presenta una oportunidad para mejorar y fortalecer los procesos de control documental en el contexto de proveedores y contratistas. La integración efectiva de estos cambios en los protocolos documentales no solo cumple con los requisitos legales, sino que también promueve entornos laborales más seguros y saludables para todos los involucrados.